Nº12

Anoche encontré a la luna
Untada de aceites perfumados
Dándose un baño de espuma
Burbujas en sus cabellos rizados.

Adornada con oro y turquesas
Ataviada con sus mejores galas
Mirándose en los espejos de un lago
Sus labios de rojo carmín pintaba.

Por su empíreo inmenso paseaba
Un tanto inquieta y vigorosa
Al igual que una niña pequeña
Tornábase dulcemente revoltosa.

Anhelando estaba de ver el albor
Ver asomar a su eterno amado
Sentir las caricias de su ardiente sol
Y embriagarse de nuevo con el calor de sus labios

2 comentarios

[Brisa - 24 de febrero de 2005 - 20:44]

A mí también me ha gustado mucho, la luna es tan especial cuando riega su luz sobre nosotros que es una continua inspiración y tú la has bordado. Un abrazo :)

[Trini - 24 de febrero de 2005 - 14:56]

¡Que bonito poema Manuel, es precioso, me ha encantado.

Besos